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Te trajimos hace cinco días y pocas horas, luego de años de «negociación» para convencer a la madre de las niñas de tener una mascota en casa.
Tenías dos mes, olías mal, estabas engripado, con conjuntivitis, casi no comías ni bebías. Luego te has infectado por culpa de tus defensas bajas.
Cada día te llevamos al veterinario, has aguantado colirio en los ojos, antiparasitarios, inyecciones diarias de antibióticos, limpiezas forzadas, a las niñas que no te dejaban ni dormir.
Hoy martes ya estabas mucho mejor, comías, corrías por toda la casa, has empezado a usar todos los juguetes que te habíamos comprado. Has empezado a subir al muro del balcón. Hemos tenido que cerrar el toldo para que no te caigas.
Poco después de las diez de la noche, después de que las chicas se despidieron, se te ocurrió subir otra vez, te has colado en el espacio entre las rejas. Cuando yo daba la vuelta por la casa corrriendo para cogerte, te has resbalado. Fui a buscarte tembloroso, te llevamos al veterinario pero ya no pudo ser.
Cinco días cuidándote ha sido suficiente para que toda esta familia esté desconsolada.
Recuerdo que la última vez que lloré fue hace 14 años, cuando tuvimos un aborto inesperado del que iba a ser nuestro primer hijo. Pensé que nunca volvería a sentir ese dolor. Aunque pasé momentos muy duros, jamás había vuelto a soltar una sola lágrima.
Hasta esta noche, que puse a cero el contador. Varias veces, y sin poder hacer nada. Tuve que encerrarme para no empeorar el desconsuelo de las niñas.
Lo que puede llegar a hacer sentir un bichito feo, peludo y mil leches, en sólo en cinco días. ¿O es empatía con los hijos? Anyway… será una larga noche, menos mal que al menos ya tengo los nuevos capítulos de House y The Big Bang Theory gracias a lo último de Casciari.
PS: Lo siento, si no escribía reventaba, ya me siento mucho mejor llegar a la postdata.
Entiendo perfectamente lo que sientes. Un abrazo hermano.
Mi gatita pasó a mejor vida éste sabado y todavía estoy triste por eso 😦
Un abrazo.
Lo siento mucho. Esas lágrimas demuestran amor. Un abrazo.
Te entiendo, Ricardo. Un abrazo para ti y para tus hijas, que lo estarán pasando muy mal.
Es increible lo que se llega a querer a estos bichos. Nosotros perdimos no hace mucho a la gata de mi mujer por cáncer (tenía 8 años la gatita).
Pensábamos que no tendríamos gatos nunca más (tenemos tortugas y un perro… y porque se nos han ido muriendo otros animales).
Pero hace un par (no mallorquín) de meses adoptamos a Salem, un gatito negro que tenía un mes y cuyos dueños no podían cuidar tal y como se merecía. Y el ciclo vuelve a empezar.
Mucho ánimos!
Lo siento. La vida es efímera, frágil. Lo que separa un cuerpo con vida de uno sin vida és algo mágico, extraño e incomprensible.
A mi también me afecta mucho más de lo normal lo que pueda afectar a mis hijos, es curioso, pero me lo tomo muy a pecho.
Un saludo y consuélate pensando que sigues vivo y formas parte de este gran circo mágico que es la vida!
Perell.
Yo siempre he dicho que el que es capaz de abandonar a su mascota, es capaz de abandonar a su hijo. Creo que el lazo es muy parecido.
Un abrazo viejo. En mi familia cada mascota ha sido uno más, y hemos llorado cada pérdida como si fueran personas.
Jo, empecé el post ilusionado por que sabía por Carme que estabas en proceso de adoptar un gatito y luego… ¡que triste! Se como te sientes, yo lo pasé muy mal cuando hace unos años se me murío la mía despues de 14 años juntos.
Espero que no te desanime para adoptar otro. Aunque tarde un anñito en recuperarme, ahora tengo dos gatitas preciosas y son la alegría de la casa.
¡ánimo!
Pingback: Cinco días bastan
Lo siento mucho Ricardo, mi más sentido pésame 😥
Buenas Ricardo, según te leía me asomaba a ver a los perros como roncaban en una esquina de la casa y recordaba haber vivido la pérdida de 2 gatos hace años y me he puesto triste, muy triste.
Es un momento duro, pero si estás convencido en tener un pequeño compañero para las niñas en casa vuelve a intentarlo, estos momentos son duros pero el resto de la vida de un animalejo así son felices todos los días.
Ánimos para la familia.
Muchos ánimos Ricardo, yo no era «de gatos» hasta que llegó Kyra a casa, aquí está, a mi lado…
Un abrazo y espero que se os vaya pasando el disgusto ó__ò
Comprendo tu pena. Tengo seis gatos en casa todos recogidos de la calle y como bien has dicho esas pequeñas bolas de pelo se hacen querer mucho 😦 no puedo evitar pasarlo mal cuando veo algún gato callejero pensando que puede ser atropellado o algo por el estilo. Ánimo y que esta desgracia no os haga desistir de cuidar un animal que es de las cosas más agradecidas que hay en este mundo.
En casa tenemos dos perritas y precisamente en Octubre del año pasado perdimos a una de las perritas, como la mayor parte del tiempo estoy fuera de casa, mis padres decidieron no adoptar ningun animalito y quedarnos solo con la nuestra. Para sorpresa nuestra una pequeñita perrita callejera (en condiciones similares, aunque peores a las que comentas, Ricardo) se coló por debajo por una puerta y se hechó frente a la TV, como es lógico no tuvimos corazón para echarla y al final se ha recuperado y tiene unas energías que para que contar.
Entiendo perfectamente como te sientes, hace ya unos años falleció una perrita de raza puddle que estuvo conmigo desde que tengo memoria, y todavía a veces pienso en ella y se siente una apretón en el pecho …
Lo siento mucho. Yo tengo una gata y no me puedo ni imaginar que le pasara algo asi.
Animo!
Mi más sentido pesame, abrazos.
Te acompaño en el sentimiento XD XD
Recuerdo a Sanchez Dragó en directo en ondacero con IsabelGemio llorando como uncrio por su gato delante de toda España. Yo le compredí a pesarde las risasde la Gemio, y te entiendo, me ocurrió lo mismo con la puerta del garaje tras10 dias.
Eres un buen tipo Galli, nos has emocionado, de verdad. Tú no podrías ser político.
Pasé por un trago similar hace tiempo y me juré que no volvía a entrar una mascota en casa. Es increible lo que se puede llegar a ¿querer? a un animal.
En enero pasado perdí en cosa de unos días a mi perra Cira. Después de estos meses en que la he echado tanto de menos, creí que ya lo iba superando.
Hoy al leer tu post, al que he llegado de la mano de Remo, he vuelto a llorar desconsolada.
Nadie te prepara para su pérdida, se les llega a querer mucho, más de lo que imaginamos.
Un abrazo para ti, y para tu familia.
Mi gato «Chispas» se quedo huerfano el segundo día de vida, lo agarré en una huerta en el campo, al lado de la de un familiar en pleno julio hace casi 5 años, pedia «socorro» a su desaparecida madre subiendose a un tronco seco aun estando sin abrir los ojos. Pensé que ese gato tenía chispa de vida.
Me siguen diciendo en la clínica y los que le conocen que tiene algo diferente, de pequeñito pensaban que se parecia a un zorro chico.
Le cuidé desde el primer día como un hijo, y como no tengo hijos es mi «creación » personal de una vida, cuidandole mucho.
Te endiendo perfectamente.
Un fuerte abrazo.
Vaya, hace no mucho lo vi desde el lado del viandante que se encuentra al pobre animalito caído en la calle (de hecho lo ví caer, enfrente de mi portal) y fue realmente impactante ver la cara del dueño que bajaba corriendo en su busca, estaba hecho un flan.
Entiendo cómo te sientes… un abrazo y muchos ánimos.
Nunca he tenido el placer de tener un perro o gato, pero te ofrezco mi pésame!
Saludos!
Espero se repongan de la pena