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De lo más patético que he visto en la blogocosa de Silicon Valley. Supera en mucho a lo peor que se podría encontrar en Valleywag, además sin nada de gracia. Michael Arrington, de Techcrunch en Hey Twitter I Have A Few Questions Too retende que le respondan a un interrogatorio al estilo policial, y se mete de forma personal muy dura y acusa a Blaine Cook –uno de los programadores/arquitectos de Twitter (que dejó la empresa hace tiempo)– de todos los fallos de Twitter y casi de la caída del imperio norteamericano.
Además los otros blogocósicos con el ombligo del tamaño del valle completo, Scoble y Dave Winer le festejan y aplauden su ataque ad-hominem e interrogatorio falaz. Y Steve Gillmor y su «banda» (incluye a Scoble y Arrington) le indican a los fundadores de Friendfeed cómo llevar su negocio, o sea, que se conviertan en un clon de Twitter por el bien de la nación.
Alucinante. Como si Twitter fuese un tema de seguridad nacional, Twitter una empresa de ellos y Blaine Cook un funcionario o político acusado de prevaricación, robo y contraespionaje para la malvada Rusia.
Joder, yo que me quejaba de la blogocosa hispana, o que envidiaba la honestidad de los bloggers anglosajones. Pero lo de esta noche me dejó de piedra. Que joputas hay que ser para meterse así con una persona que ya ni es empleado de la empresa, y además pretender que todo Silicon Valley deba movilizarse para que puedan escribior sus «tuits».
¡La que está liando Blain Cook! ¡Se rompe USA! Manda huevos, si parecen críos enfermos con el mono 😦
La respuesta de Biz y Jack:
http://blog.twitter.com/2008/05/its-not-rocket-science-but-its-our-work.html
Steve tiene un estilo peculiar de estimular el pensamiento a futuro, inclusive creo que en este Gillmor Gang se controló un poco… no es la mejor forma, pero su mensaje fue recibido. Con Cook tienes toda la razón, el ataque es muy directo.
Yo alucino viendo cómo se las gastan los yonkis de Twitter. Sí, a mí también me sale la puñetera ballena voladora de vez en cuanto, últimamente con mucha frecuencia. Entonces me pongo a hacer otra cosa y vuelvo al cabo de un rato. Lo último que se me ocurre es poner una historia en mi blog vociferando que twitter es una porquería sin la que no puedo vivir. En fin…
No podría estar mas de acuerdo, nunca hay que patear al caído. A Arrington se le ha subido la fama a la cabeza.
Tienes toda la razón, tiene un ombligo que no le cabe en la barriga.
Si cree que no funciona bien o es una mierda, por qué no hace él algo mejor? Pasta tiene, y saber sabe (claro, según él).
Tened en cuenta que muchos de los que critican las caidas de Twitter son personajillos que no pueden estar 5 minutos sin conectarse al Twitter y decir «de camino a una reunión con Felipini Willson» o «comiendo en Juani’s… qué bien se come aquí».
Que se compren una vida y dejen de fastidiar.